"No puedo conectarme conmigo misma"- La vida pasada de Yesica

Yesica vino a sesión porque sentía una gran desconexión consigo misma, una sensación de vacío muy grande. Esa desconexión con ella misma, también la llevaba a no conectar con otras personas, principalmente, con su familia, con quienes sentía que no podía expresarse ni abrirse realmente.

En regresión, fue a una vida pasada donde había sido una mujer llamada Esperanza que había crecido en una familia con su papá, mamá y un hermanito, con quienes se sentía muy feliz y a gusto. Su familia en algún momento muere por algo relacionado a la guerra y ahí, conecta con la culpa de sentir que no les había expresado lo suficiente cuando lxs quería (algo similar a lo que sentía en su vida actual con su familia).

Al tiempo, se casa con un hombre al que quería y en quien confiaba pero que después, la traiciona agrediendo físicamente porque no cumplía con los estándares de “esposa” que esperaba. Igualmente, ella decide quedarse a su lado con la esperanza de que él cambie.

Años mas tarde, cuando su esposo muere en una pelea, ella por fin siente que se libera. Finalmente muere a los 56, sola en su casa, acompañada por un perro y un gato, con su cuerpo muy débil y cansado.

El momento que estaba originando su desconexión y sensación de vacío es cuando vive el momento de violencia con su pareja, donde se siente dolida y traicionada por haber confiado en él y no puede terminar de comprender lo que estaba sucediendo. En ese momento, mentalmente se dice "todo va a estar bien" pero lo que realmente siente es mucho dolor, soledad, enojo y angustia. Todo eso seguía influyendo en su vida actual, donde elegía callarse cosas para no incomodar y donde en vez de escuchar y seguir su corazón, su cabeza tomaba el control, desconectándose de las emociones y haciendo que se dificulte volver a si misma a encontrarse de nuevo.

Hizo consciente que la familia y la pareja de esa vida como Esperanza era la misma que la acompañaba en esta vida como Yesica. Aprendió de esa encarnación que si quiere, puede y quedó como aprendizaje pendiente el aprender a poner limites. Recordar esa vida pasada le sirvió para poder ver y trabajar sus sombras.

Nos encontramos al mes y me contó que se sentía mucho mas aliviada, que esa sensación de angustia fuerte que aparecía seguido ya no estaba presente. También, se vio compartiendo mas tiempo de calidad con su familia y poniendo limites a las situaciones que en otro momento dejaba pasar.

Trabajar con la terapia regresiva nos permite recordar cuales son las lecciones que aun tenemos pendientes de aprender para evolucionar. Puedo ver a través de todas las sesiones que he acompañado, que querer esconder o tapar las situaciones que nos generan dolor, no es una solución, ya que todo lo que resiste, persiste, por lo que lo no resuelto vuelve a aparecer en nuestras vidas, en otros momentos y lugares, con otros nombres y roles hasta que podamos mirarlo de frente y tengamos el coraje de sanarlo.